Más
Gracias a un pituto familiar, Pablo se une al equipo de comunicaciones de un diputado de derecha. Su misión como periodista será apoyar una campaña que proyecte a Jaime Álamos, hijo de una larga dinastía política chilena, a la Cámara Alta. Sin embargo, poco a poco el trabajo se tornará insufrible y llevará al protagonista a rememorar su infancia, la relación con sus padres, amistarse con una drag queen del Paseo Ahumada, revisitar sus fracasos amorosos y las circunstancias que lo llevaron a elegir una carrera que lo tiene instalado en el centro de la podredumbre electoral. Así, empantanado en una rutina de minutas, trabajo en terreno y viajes al congreso, el protagonista manotea entre sus afectos y la presión social. Busca a ciegas una justificación que lo mantenga a flote, mientras asesora a un político que enarbola como bandera valores en los que no cree: la familia tradicional, el capitalismo salvaje, la moral cristiana. Zona de promesas de Javier Rodríguez retuerce con agilidad y humor la banalidad del exitismo al que nos sometemos.